Doble limpieza con el mordedor LUU
En LUU Kids, creemos que el cuidado de la salud infantil comienza desde los primeros días y abarca cada detalle, incluso el más pequeño. Por eso, al diseñar nuestro mordedor, consideramos la higiene en dos dimensiones clave: introducir al bebé al mundo del cuidado bucal y ofrecer a los padres un producto fácil y seguro de limpiar. El mordedor LUU es sinónimo de doble higiene, brindando tranquilidad y sentando las bases para el futuro.
El primer paso para una sonrisa sana: un mordedor que limpia
Incluso antes de que llegue el primer cepillo de dientes, la boca del bebé requiere un cuidado delicado. Diseñado por ortodoncistas expertos, el mordedor LUU es la primera herramienta instintiva para la higiene bucal. Su diseño innovador con suaves protuberancias especialmente ubicadas hace mucho más que aliviar el dolor. Mientras al bebé le salen los dientes y satisface su necesidad natural de morder, estos elementos precisos trabajan activamente en su boca. Al masajear suavemente las encías, las protuberancias ayudan a eliminar los restos de comida y las preparan para la salida de los primeros dientes. Una vez que los dientes han erupcionado, el mordedor los cuida con delicadeza, ayudando a limpiar mecánicamente sus superficies. Además, su estructura también limpia suavemente la lengua, acostumbrando al niño a la sensación de una boca limpia. Este es un paso fundamental que crea asociaciones positivas y puede facilitar significativamente el aprendizaje del cepillado independiente en el futuro. No solo alivia el dolor, sino que también es una introducción consciente al mundo de los hábitos saludables.
Fácil limpieza y seguridad
Entendemos perfectamente que cualquier producto que un niño se lleve a la boca debe estar impecablemente limpio. Por eso, el diseño del mordedor LUU se ha pensado cuidadosamente para garantizar una higiene sin complicaciones para los padres. El mordedor está fabricado en una sola pieza sólida de material certificado de la más alta calidad. Su superficie lisa y no porosa no tiene grietas, recovecos ni juntas innecesarias donde puedan acumularse bacterias, moho o suciedad. Mantenerlo limpio es increíblemente sencillo. Simplemente lávelo con agua corriente y un detergente suave, luego enjuague y seque bien. Gracias al uso de materiales de primera calidad, el mordedor es resistente a altas temperaturas, lo que permite verterlo en agua hirviendo para mantenerlo completamente estéril. Esta simplicidad y seguridad garantizan que los padres ofrezcan a sus hijos un producto no solo eficaz y adaptado a su desarrollo, sino también, sobre todo, 100 % higiénico.
Mordedores LUU
Conozca los mordedores LUU: creados pensando en el desarrollo saludable de su hijo.